Las trabajadoras y los trabajadores puertorriqueños estamos viviendo momentos extremadamente difíciles. La legislación que se ha venido aprobando en el presente cuatrienio continúa, como las anteriores, poniendo todo el peso de la solución de la crisis sobre nuestros hombros. La Ley 26, antes el Proyecto de la Cámara 938, no es la excepción a esta tendencia.

Las medidas de austeridad y los cambios a la realidad laboral que nos han sido impuestos con dicha ley, aún con todos los esfuerzos que la Unión General de Trabajadores y otros sindicatos hemos hecho para minimizar su impacto en nuestras vidas, pretenden reducir, aún más, nuestros derechos y conquistas laborales.

Sin embargo, contrario a lo que incorrectamente han señalado algunos jefes de agencias y otros políticos de pasillos en el Gobierno, nuestros convenios están vigentes y nosotros lo defenderemos con el rigor que demanda la situación.

Nuestros delegados y organizadores de campo seguirán dándole continuidad a sus tareas de servicio y representación a la matrícula, de la siguiente manera:

  1. Radicando regularmente las querellas que sean meritorias ante cualquier intento de los patronos por violar los derechos de los unionados.
  2. Continuando desarrollando nuestras relaciones obrero-patronales en el marco establecido por el Convenio vigente de cada agencia.
  3. Tal y como lo hemos hecho en el pasado, cuando surjan diferencias diferencias de interpretación sobre el Convenio habremos de considerar y procesar las mismas a través de los mecanismos establecidos a esos efectos en los foros correspondientes.
  4. Cada trabajador y trabajadora deberá solicitar, formalmente, beneficios tales como el día de cumpleaños, funeral y otros, en la forma acostumbrada. De éstos ser denegados, debe notificar la situación de inmediato a su delegado, o al Organizador de la Unión.

Como hemos señalado desde siempre, el mejor convenio es aquel que hacemos valer y defendemos todos los días en el Taller. Desde esta perspectiva, es importante que cada trabajador se haga consciente de su responsabilidad asumiendo plenamente el compromiso con la defensa de los derechos y beneficios que están consignados en el Convenio Colectivo.

La Unión continuará acudiendo a los tribunales o a los foros que corresponda para hacer valer nuestros derechos. Nosotros vamos a continuar radicando, ante el organismo que corresponda, los reclamos, las querellas que sean necesarias y los casos que la realidad demande en la defensa de los acuerdos y garantías legales que la legislación aprobada establece. Igualmente, continuaremos la lucha en la calle con toda la fuerza de nuestra matrícula.

La radicación de la solicitud de quiebra por parte del Gobierno y la Junta de Control Fiscal, que muchos han comenzado a invocar para incumplir con los acuerdos negociados, no puede, reiteramos, no puede ser una camisa de fuerza para impedir que se nos garantice y se cumpla con lo que en derecho nos corresponde.

Nuestro mensaje a la matrícula ugetista es sencillo y claro:

En la medida en que nuestros convenios se mantienen vigentes, la Unión General de Trabajadores continuará luchando cada día para hacer valer los mismos y garantizar a cada trabajadora y cada trabajador que representamos que se respeten sus derechos, se honren los beneficios, luchando contra cualquier abuso o atropello que pretenda imponer el patrono.

Hoy, como nunca antes, debemos continuar luchando unidos, fortaleciendo nuestro instrumento de lucha, la Unión General de Trabajadores.