DTRH

Se revela nuevamente toda una conspiración patronal en el Departamento del Trabajo y Recursos Humanos con el propósito de crear malestar entre los empleados con su representante sindical exclusivo: la UGT. En medio de la negociación colectiva, el asesor sindical de la UGT solicitó a la administración del DTRH que proveyera una lista de los empleados gerenciales y personal unionado ejerciendo funciones de supervisión que están recibiendo pagos diferenciales por ello. Parece que esa petición, en ejercicio de la potestad de representación sindical de la UGT no le agradó al patrono.

Acto seguido y en venganza, la gerencia del DTRH envió una carta al personal unionado en la que requería se informara, por instrucciones de la UGT, cuál de ellos recibía pagos diferenciales, sabiendo que esa no era la petición hecha por la Unión. Es sabido que existe otro personal ajeno al involucrado en la controversia que recibe pagos diferenciales por el tipo de función de alto riesgo que realizan dentro de la Unidad Apropiada, como lo son los recopiladores de datos de estadísticas, y otros. Los recopiladores de datos estadísticos tienen que salir a áreas en la calle de alta incidencia criminal. Pero eso no fue lo que la UGT solicitó.

Lo que se solicitó fue la lista de gerenciales y empleados unionados que ejercen funciones de supervisión y a quienes se les paga por ello un diferencial salarial. De examinar la lista de ese personal es de lo que se trata el asunto en controversia en la negociación del Convenio Colectivo.

La carta del patrono tuvo la intención clara de provocar molestia entre el personal unionado con la UGT. Pero esa intención quedó evidenciada a clara vista y el patrono no logró pasar gato por liebre. Se le vio la costura a la carta.

Es hora de que el DTRH frene toda esa estrategia malsana y comience a negociar seriamente y de buena fe para poder tener finalmente un Convenio Colectivo y acabe de implantar ya de una vez y por todas el Plan de Clasificación y Retribución que ha seguido postergando irresponsablemente. No más dilaciones. Ya es hora de que, por fin, el Secretario del Trabajo, Vance Thomas, cumpla la función ministerial que se le confirió al ser nombrado al cargo y empiece a poner el ejemplo en su casa.
Mayo