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Nos dedicamos en Puerto Rico a sembrar cemento. Abandonamos la agricultura. Dependemos de las importaciones alimentarias para comer. Una catástrofe o un conflicto bélico que interrumpa el tráfico marítimo y aéreo normal por un tiempo terminaría hambreando al país.

Es cierto, como dice la Secretaria de Agricultura, Myrna Comas, que tenemos una dieta alta en proteínas que hace imposible alcanzar una autarquía, o sea, una autosuficiencia alimentaria del cien por ciento. Pero somos una isla y tenemos que garantizar la subsistencia alimentaria del pueblo de Puerto Rico por un período considerable, en caso de que se interrumpa, por las circunstancias que sean, el tráfico marítimo o aéreo a Puerto Rico.

Durante una conferencia de prensa para anunciar la nueva ley que busca que los centros que ofrecen distracciones y alimentos a personas de edad avanzada compren hasta un 40% de sus productos y servicios en la Isla, la Secretaria dijo que la dieta alta en proteína del puertorriqueño haría difícil lograr al 100% que se produzca en la Isla lo que consumimos.

Comas Pagán dijo que como parte del Plan de Uso de Terrenos, el Departamento de Agricultura y la Junta de Planificación, han identificado la existencia al día de hoy de 600,000 cuerdas de uso agrícola en Puerto Rico. Incluyendo en ese Plan, la identificación de terrenos privados, reservas agrícolas, y tierras del gobierno.

Ciertamente, hay que aplaudir a Comas en su gestión en la secretaría de Agricultura porque ha hecho un plausible esfuerzo por incrementar la actividad agrícola en Puerto Rico. Si realmente se comprueba que ha aumentado entre un 3% y un 5% la producción agrícola local, como ella alega, consiguiéndose reducir las importaciones, entonces se puede decir que Puerto Rico está avanzando agrícolamente.

Si el avance es como Comas dice, la producción agrícola de Puerto Rico avanzó de un 15% del consumo local a un estimado ahora de entre 18% y 20%. O sea, que importamos entre un 80 a un 82 por ciento de lo que consumimos alimentariamente.

Pues bien, que siga el avance. Todavía queda mucho camino por recorrer. Es largo el camino que hay todavía que andar. Empero, de acuerdo a estas cifras, nos movemos, por lo que si continuamos dando pasitos de avance, podremos llegar a una posición razonable dentro de la meta de una seguridad alimentaria para el país.

Este incremento, conforme a la titular de Agricultura, obedece al cultivo de productos que se cosechan en corto plazo, como serían hortalizas, frutas y farináceos. Se anticipa un crecimiento agrícola mayor, una vez se den las cosechas de café, chinas y aguacates que toman más tiempo. El resultado ha sido que el ingreso bruto agrícola aumentó entre el año 2011-2012 al año 2013-2014 en $180 millones, informó Comas.

Hay, también, que poner énfasis en la industria avícola, pecuaria, porcina y pesquera. El cuadro agropecuario en general, junto con el desarrollo de la industria pesquera, harán de Puerto Rico una nación, no sólo con garantías alimentarias para su población, sino que se estarán dando pasos certeros para un nuevo paradigma económico que nos saque de la dependencia.

Un aplauso para Comas y que siga logrando hacer avanzar nuestra agricultura, sin olvidar los demás sectores alimentarios relacionados.