Para los trabajadores de la Cruz Roja y la unión que los representa, UGT, ha resultado en toda una sorpresa negativa la actitud asumida por los directivos de la entidad localizada en las inmediaciones del Centro Médico de Puerto Rico, al ser informados de que uno de sus empleados arrojó positivo a Covid-19.

Cabría esperar que un patrono que cifra todo su accionar público “buscando salvar vidas” respondiera afirmativamente a los protocolos establecidos, ante el informe de que uno de sus empleados arrojó positivo a Coronavirus. Es inconcebible e inaceptable que se hayan hecho de la vista larga, en vez de hacer la prueba molecular a todo el personal que estuvo en contacto con la persona afectada.

Sin embargo, los directivos de la Cruz Roja no han querido darse por enterados de la situación. Este hecho, además de sorpresa ha causado indignación y mucha preocupación entre aquellos que han tenido que permanecer trabajando en la incertidumbre de haber sido contagiados. Podemos considerar esto como una acción irresponsable y temeraria.

Ante esta realidad estamos demandando que se haga la prueba a todo el personal que estuvo en contacto con la persona que arrojó positivo para Covid-19, conforme a los protocolos establecidos por el CDC, el Departamento de Salud de P.R. y la OMS.

Otro hecho que denuncian los empleados es la continua insistencia de la dirección de la Cruz Roja local de sustituir el personal en sus tareas ordinarias y colocar al personal voluntario a realizar las mismas. En este momento nos encontramos en la etapa de recopilar la evidencia para radicar los recursos legales aplicables ante los foros correspondientes, para hacer valer los derechos de los trabajadores y el Convenio Colectivo vigente.

El prestigioso nombre de CRUZ ROJA se deteriora con este tipo de acciones. Todos tenemos la más alta expectativa de una organización tan prestigiosa, pero que hoy se distingue por el trato inadecuado de los trabajadores en algo tan sensitivo como la salud y la justicia laboral.

¡CUENTA CON TU UNIÓN!